La diferencia entre la participación y el compromiso es como el jamón y los huevos, el pollo está involucrado y el cerdo está comprometido.
Martina Navratilova
El año nuevo avanza y las actividades cotidianas van ocupando los horarios enteros de nuestros días. Aquellos buenos deseos de las fiestas de fin de año se van desplazando y entonces ¿cómo podemos hacer para que no pase otro año sin cumplir aquello que queremos lograr?
Muchas veces iniciamos esa dieta que mejoraría nuestra salud o elevaría nuestro sistema inmunológico, adquirimos un bien patrimonial, planeamos aquel viaje soñado sin realizarlo, hacemos ejercicio físico y lo abandonamos, nunca aprendemos algo nuevo y sobre las relaciones personales; nunca ofrecemos tiempo de calidad a nuestras familias y amistades; estas son algunas de las muchas cosas que por diversas causas interrumpimos y que difícilmente logramos. Nos hacemos una promesa y luego la abandonamos a mitad del camino.
Según una encuesta de la empresa mexicana A, dos de cada 10 personas, logran lo que se proponen a principios del año. Otros expertos opinan que para hacer la diferencia hay que comenzar por un compromiso personal, antes que hacerlo con otras personas y generar una energía motivadora que nos impida desistir. Es hacer un ejercicio de conciencia plena para conocernos, entender quiénes somos y lo que hemos hecho hasta hoy en nuestras vidas.
Te has preguntado: ¿por qué nos es más sencillo cumplir con los compromisos con los demás que con nosotros mismos? El compromiso personal es una actitud indispensable que todos necesitamos para lograr nuestros propósitos de vida y superar obstáculos o temores que dominan nuestros planes y pueden perjudicarlo todo. Pensemos que alguien que admiramos mucho, un deportista, un artista, alguien con liderazgo empresarial o espiritual y nos preguntamos ¿cómo logró llegar hasta ahí? Y después de investigar un poco, nos sorprende conocer que su camino para lograr esas metas admirables estuvo lleno de inconvenientes, sin embargo, hubo un proceso, una metodología que siguieron, paso a paso, con disciplina y constancia, superando todo tipo de adversidades.
Para evitar aplazar por otro año nuestros propósitos, existen algunas herramientas a las que podemos recurrir y que pueden combinarse con el ajetreo diario. Lo primero es dejar de admirar con pasividad cómo otras personas lo logran y nosotros no. Lo segundo es activar nuestra energía personal y elaborar un plan de acción y ahí nos enfrentamos al primer obstáculo ¿cómo desarrollarlo?
Se le atribuye a George T. Dorian, un ejecutivo de empresas, que publicó un artículo en la revista Managment Review (1981) la creación de la metodología de objetivos SMART por sus siglas en inglés (Specific, Measurable, Achivable, Relevant, Time Bound) resultó muy útil para establecer objetivos medio empresarial y se puede aplicar a la vida personal.
En español lo definimos como: Específico, Medible, Alcanzable, Relevante y Temporal. Esto significa que se debe comenzar por escribir la metas que tenemos en forma específica, es decir, exactamente que queremos hacer, de la manera más simple y luego tratar de explicar el por qué de aquel propósito. Empecemos por una a la vez.
Lo segundo es establecer un objetivo medible, es decir, en que tiempo puedo alcanzar esa meta, un tiempo corto es mejor que dejarlo a largo plazo. Algunos especialistas recomiendan llevar una bitácora de progresos para una dieta o plan de ejercicio físico, un diario o un plan de ahorros si se trata de un objetivo económico, semanal o mensual, según sea el caso.
Para que el objetivo sea alcanzable, debemos asegurarnos de que sea algo que realmente podemos cumplir, se trata de una revisión personal de lo que somos capaces de hacer, de acuerdo a nuestras hablidades y conocimientos. Podemos soprendernos que después de definir claramente el objetivo es posible que seamos capaces de hacer algo más retador y reconocer capacidades que no sabíamos que podiamos tener.
Asimismo el objetivo debe ser realista, a eso se refiere el método cuando menciona la palabra relevante, muchos grandes activistas han encontrado la necesidad de tranformar su entorno a partir de este principio en su metodología de acción, pues definen algo que necesita la sociedad o es importante para nosotros o quienes nos rodean y lo convierten en una realidad.
Es muy importante definir un tiempo límite para conseguir nuestro objetivo, el uso de agendas y calendarios de planeación son herramientas útiles. Eso nos posiciona en un entorno motivador para ejercer mayor esfuerzo, buscar los recursos necesarios para lograrlo y es posible así ver los resultados a cada paso. Los objetivos a largo plazo en general, nunca se cumplen.
Un ejemplo concreto podría ser el «sueño guajiro» que casi todos nos planteamos al inicio del año: «Hacer ejercicio…» para expresarlo con la metodología SMART nos haríamos las siguientes preguntas:
Específico: ¿Qué tipo de ejercicio? ¿Cuántas sesiones? ¿Con qué frecuencia y duración de cada una?
Medible: ¿Cuál es la métrica? ¿Número de veces realizada la actividad vs. las planeadas?
Alcanzable: ¿Es una actividad física que sí estoy en condiciones de llevarla a cabo?
Relevante: ¿Por qué quiero hacerlo? ¿Cómo va a impactar en mi vida? ¿Para qué quiero hacerlo?
Temporal: ¿Es una actividad para un periodo de tiempo específico o quiero que sea el inicio de un nuevo hábito a largo plazo?
Si convretimos las respuestas en una frase de compromiso ante nosotros mismos, la declaración materializada podría ser:
«Hoy (día) me comprometo conmigo mismo a realizar cinco sesiones semanales de 30 minutos de caminata, porque necesito mejorar mi condición cardiaca y circulatoria, para precenir enfermedades y sentirme más felz. Lo haré de la última semana de enero hasta el último día del año. Llevaré un calendario para contabilizar cada sesión y me premiaré cada mes con (recompensa) por haber cumplido en ese periodo».
Las personas que han liderado los grandes cambios sociales positivos comenzaron por una metodología de transformación individual que los convirtió en ejemplos para la sociedad. De un compromiso personal, generaron la energía transformadora de todo el entorno, esto es posible, porque dejaron de ser espectadores y pasaron a ser agentes del cambio. En Del Pueblo Funeral Home queremos inspirarte con pensamientos positivos para que todo sea mejor en este nuevo año, a que te honres a ti mismo como honras tu palabra ante los demás. Te acompañamos en tus propósitos y te recordamos que hacemos fáciles los momentos más difíciles.